Imagen: http://blogapp.binson.dk/ |
Con los más recientes acontecimientos en Libia tuve la sensación que estamos asociando un fenómeno político con el fenómeno religioso. Quizá sea por inercia, por cultura o por ser un lenguaje impuesto desde los medios de comunicación masiva, nos referimos al pueblo árabe, cuando en realidad queremos hablar de un país que forma parte del pueblo árabe por tener las mismos origenes culturales y religiosos. No nos damos cuenta siquiera que si hablamos del conflicto político en Libia lo idóneo sería constreñirnos a un significado de la misma índole.
El problema de Libia no se origina en la religión y no tiene ahora nada que ver con ella. Es su política económica, el petróleo y su sistema de gobierno el que es cuestionado por propios y extraños. Me parece que debemos hacer al Islam aun lado y enfocar nuestro análisis a la política sin olvidar la cuestión cultural pero tampoco sobrevalorándola.
Anexo estas dos hojas fragmento del libro Sociología con aplicaciones en países de habla hispana de Richard J. Gelles y Ann Levine donde precisamente hacen una crítica sobre la asociación que comunmente se hace del islam y sus seguidores con el terrorismo.
Islam Oriente y Occidente
Great work keep it coming, best blog on earth
ResponderBorrargeneric paxil